¿Qué estudia un diseñador de interiores?
Se sabe que los espacios en los que nos movemos tienen una gran influencia en nuestro estado de ánimo y bienestar. Por ello, existen los especialistas en diseño de interiores, los profesionales encargados de conceptualizar y establecer esos ambientes para crear espacios funcionales que también sean agradables estéticamente. De hecho, en la actualidad es prácticamente imposible plantearse la construcción de una vivienda, un estudio profesional o un espacio comercial sin la intervención del diseñador de interiores.
Estos profesionales buscan planificar el diseño de viviendas y lugares de trabajo para mejorar la experiencia del espacio interior desde el punto de vista de la habitabilidad y funcionabilidad, manipulando y adaptando los distintos elementos según las necesidades e intereses de las personas que van a ocupar ese espacio. El objetivo es conseguir los mejores acabados desde el punto de vista espacial, funcional, estético, tecnológico, económico e, incluso, en cuanto a criterios de sustentabilidad.
Rol del técnico universitario en diseño de interiores
El técnico en diseño de interiores se encarga de determinar cuál es la mejor manera de distribuir el espacio en los edificios. También asume la tarea de diseñar cualquier cambio relacionado con la estructura de un edificio que requiera la modificación de las paredes o hacer cambios en el sistema de iluminación.
Sus principales objetivos son optimizar la estructura del edificio y pensar en su funcionalidad. Por consiguiente, este profesional debe dominar los conceptos arquitectónicos básicos que le permitan realizar su trabajo, así como aplicar conocimientos de la Psicología que le permitan distribuir ese espacio de la manera más funcional posible teniendo en cuenta las necesidades y preferencias de sus clientes.
¿Qué estudiar para ser diseñador de interiores?
El objetivo de un profesional en diseño de interiores es aprovechar al máximo el espacio disponible, dando vida a espacios atractivos que se adapten a las necesidades, preferencias y usos que les darán las personas que habiten o trabajen en ellos. Por esa razón, para ser diseñador de interiores no basta con tener creatividad, es necesario contar con una formación sólida. Por eso, es necesario cursar estudios universitarios para obtener una titulación oficial, que legitime y valide los conocimientos y capacidades de los diseñadores.
Durante tus estudios, se desarrollarán habilidades creativas y capacidad de innovación; conocimientos de arte, arquitectura, teoría del color y de la forma; geometría; manejo de programas informáticos para la representación de objetos y espacios; habilidades de liderazgo y trabajo en equipo; flexibilidad y adaptación al cambio.
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